No siempre fue fácil jugar videojuegos en Turquía. A principios de los años 2000, los jugadores turcos buscaban copias clandestinas de títulos populares, ya que los grandes editores y distribuidores ignoraban a la apasionada base de jugadores que clamaba por jugar sus juegos. Entre los jugadores que buscaban el título más reciente estaba Hasan Colakoglu. En la actualidad, es el vicepresidente internacional de Riot, donde se enfoca en la creación de comunidades duraderas mediante la localización de la experiencia del jugador. Pero en 2003, fue uno de los muchos jugadores turcos que buscaban una mejor experiencia. Cansado de buscar, trabajó para encontrar la solución.
''Quería que mi carrera se enfocara en mejorar la funcionalidad para los jugadores turcos'', dijo Hasan. ''Ese era el objetivo de Avaturk, mi primera empresa. Distribuíamos juegos de boxeo y gestionábamos algunos servidores competitivos en juegos como Unreal Tournament, Counter-Strike y FIFA. A partir de ahí, nos asociamos con World Cyber Games, con sede en Corea, que estaba organizando las primeras etapas de esports''.
En ese momento, el espacio de los juegos competitivos era todavía un nicho. En 2005, el dinero se agotó y la empresa de Hasan cerró sus puertas. Pero su misión no había cambiado. En su búsqueda de lo que vendría después, se enteró de que una de las marcas más queridas de los videojuegos iba a llegar a Turquía.
''Me enteré de que Nintendo iba a abrir una oficina de distribución en Turquía'', dijo Hasan. ''Me convertí en el director nacional de Nintendo en lo que yo llamo la época dorada de Nintendo. Lanzamos la DS, la 3DS y un montón de videojuegos buenísimos. Fue muy divertido. Pero mi corazón siempre estuvo ligado a los juegos competitivos de PC''.
En el momento cumbre de la generación de las consolas, el modelo de negocio de Riot era un poco extraño. Centrado por completo en un título gratuito y exclusivo para PC, League of Legends contrastaba con el modelo de videojuegos tradicional. Pero para Hasan, eso era exactamente el tipo de juego que le interesaba.
''Conocí a Nicolo en 2011 cuando leí sobre el creciente éxito de Riot'', dijo Hasan. ''Simplemente solicité una licencia de distribución para hacer llegar LoL a Turquía, pero me dijeron que Riot no proporcionaba licencias, salvo en circunstancias extraordinarias. Entonces me dijo: 'si te interesa el juego, ahora mismo estamos contratando en Turquía'".
Luego de un largo proceso de entrevistas (algo que ciertamente no ha cambiado en Riot a lo largo de la siguiente década), Hasan se unió a Riot como el primer empleado en Turquía. En ese momento, Riot contaba con cerca de 400 personas en total. Ahora la empresa tiene más de 4000 empleados con más de 20 oficinas en todo el mundo. Cuando Hasan inauguró la oficina de Estambul en 2012, ésta se convirtió en la sexta oficina de Riot.
''Me enfoqué en la localización del videojuego brindando el mejor servicio a los jugadores turcos'', dijo Hasan. ''Eso no existía entonces. Para los jugadores, era algo completamente diferente a lo que estaban acostumbrados y se notaba. El videojuego creció rápidamente y se convirtió en el más importante de Turquía y en el principal esport''.
Como director nacional de Turquía, Hasan trató de ofrecer la experiencia que él buscaba como jugador. Pero para comprender realmente cómo experimentaban el videojuego los jugadores, utilizó una estrategia poco convencional.
''Antes de que League of Legends se lanzara en Turquía en 2012, se me ocurrió la peculiar idea de no contratar agentes externos de soporte al jugador'', dijo Hasan entre risas. ''Dije: 'tenemos 30 Rioters aquí y quiero que todos entiendan mejor el viaje del jugador'. Así que hicimos que todos respondieran de 20 a 30 solicitudes de jugadores, además de su trabajo normal. Nos ocupábamos de todo, desde las transferencias de servidores hasta los problemas con el sistema de tribunal de jugadores que teníamos en ese momento. No creo que eso se haya vuelto a intentar en la historia de Riot, y con razón''.
Si bien el equipo aprendió sobre todo la importancia de los agentes de soporte al jugador dedicados, el experimento nos proporcionó una importante perspectiva directa de cómo los jugadores estaban experimentando League of Legends cuando se lanzó en Turquía. Con el tiempo, la oficina pasó de tener solo a Hasan, a 30 empleados en su lanzamiento y luego a tener más de 60. Pero mientras la oficina crecía, Riot también lo hacía, y había que hacer cambios para reflejar el crecimiento de la empresa y de la base de jugadores.
En 2016, Hasan se mudó a la sede principal en Los Ángeles, donde asumió el cargo de director general de Mercados Emergentes. Los mercados emergentes abarcaban desde Brasil hasta Turquía, Rusia y México. Aunque las culturas y las comunidades de estos países son distintas, la forma en que experimentaban el juego era, en realidad, bastante similar.
''A fin de cuentas, los jugadores son jugadores. Hay retos lingüísticos y, a veces, gubernamentales, pero si pensamos en la forma en que un jugador en un cibercafé vietnamita experimenta el juego y la forma en que un jugador en un cibercafé turco lo experimenta, es la misma'', dijo Hasan.
Así que su objetivo era asegurarse de que las oficinas mundiales de Riot trabajaran en conjunto. Necesitaban compartir sus propios aprendizajes. Y necesitaban más apoyo de la oficina principal.
''Al principio, nuestras oficinas nacionales eran bastante independientes'', dijo. ''Tenían que descifrar cómo hacer negocios en su zona a su manera, así que lo que teníamos que hacer era pensar en cómo centralizar con eficacia las funciones en las que el equipo mundial podía aportar más valor que los equipos locales. Eso les brinda libertad a esos equipos para que puedan conectar de verdad con los jugadores de sus regiones al crear activaciones hiperlocales''.
Los directivos de Riot solían ser directivos nacionales. Hasan llegó de Turquía. Hannes Seifert, antiguo director nacional en Alemania, ahora dirige las operaciones europeas. Lorena Batarse comenzó con operaciones en Latinoamérica y ahora dirige la distribución en América. Alex Kraynov, antiguo director nacional en Rusia, se encarga de la distribución en APAC.
Los directores nacionales son algunos de los puestos más importantes en Riot. Son directamente responsables de una gran variedad de funciones, desde los esports hasta las relaciones gubernamentales, además de fomentar las colaboraciones. En su región, son la voz de los jugadores ante el resto de Riot, y comunican cómo juegan los jugadores y qué necesitan para disfrutar más de los juegos de Riot.
Desde que Hasan era director nacional, el puesto ha cambiado para permitir que los directores nacionales se enfoquen en lo que es verdaderamente importante para los jugadores de sus regiones.
''Estaba dirigiendo League of Legends en Turquía con 60 personas'', dijo Hasan. ''Ahora, el director nacional, Erdinc Iyikul, tiene un equipo de unos 15 Rioters, quienes se encargan de 5 juegos y de alrededor de tres veces más jugadores que cuando yo estaba allí. Eso es posible gracias a los cambios que hemos hecho como empresa y a lo que se le ha quitado de encima al director nacional, pues ya no son responsables de dirigir todos los aspectos del juego. Tuvimos que cambiar a medida que hemos crecido para que el director nacional no tenga que sacrificar la resonancia de los jugadores y las capacidades locales''.
Pero aún queda mucho trabajo por hacer. Hoy en día, contamos con múltiples videojuegos y propiedades de entretenimiento, así como otros en camino, por lo que estamos aumentando nuestros esfuerzos de distribución para asegurarnos de que todos los jugadores puedan disfrutar de los videojuegos de la mejor manera posible. Eso significa que debemos seguir llenando todas las oficinas que tenemos con nuevos Rioters apasionados. Esto implica la apertura de nuevas oficinas para hacer que los Rioters estén aún más cerca de los jugadores de su región. Además de cambiar la forma en que operamos como empresa para asegurarnos de que cada oficina, ya sea en Turquía, Brasil, Japón o en cualquier otra ciudad del mundo a la que llamemos hogar, trabaje en conjunto con el fin de poner la experiencia del jugador en primer lugar.